Deselvuelve todo lo que dejaste enrollado en mi cerebro,
de tus sombrías aventuras ya no quiero saber más.
Si en el momento no supiste qué mano debías besar
¿por qué he ahora de dejarte volver a intentar?
¿Acaso crees que esto es solamente un juego,
nada más echado al azar?
Quizás haya sido así antes,
pero te aseguro que ahora ya no más.
He aprendido con la vida
que a personas como tú más me vale maltratar,
no creas que soy una chica malintencionada,
simplemente soy una chica a la que no le gusta ser humillada,
no como otras, esas que tú conoces,
que andan llorando por ahí.
Y la arrogancia es un pecado,
lo sé,
pero ¿tengo cara de santa acaso?
No tengo la intención de serlo y
en efecto, nunca lo seré,
esto que yo tengo dentro me ayuda a decir (no)claramente lo que siento.
Estoy cansada de ser la de la cabeza agachada,
aparentando ser alguien que en realidad no soy.
Toma y llévate lejos cada vestigio de tu olor,
porque en mi cuarto no quedará rastro alguno
de este desastroso (des)amor.
Afortunadamente yo sí puedo salvar mis sábanas de aquellos recuerdos,
lamentablemente las tuyas quedarán manchadas por siempre,
literalmente.
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